En el año 2016 la Departamental Mar del Plata de la AJB solicitó la intervención de la Dirección de Resolución de Conflictos de la Suprema Corte de Justicia por la situación de violencia laboral existente en el Juzgado de Familia N° 4 local. En el 2017 esta Dirección dio intervención a la Subsecretaría de Control Disciplinario de la Corte y en abril del 2019 el procurador lo denunció ante el jurado de enjuiciamiento de magistrados iniciándose su juicio político por mal desempeño y violencia laboral y de género. Este Jurado abrió el proceso de destitución en diciembre de 2019, para que 10 meses después -26/10/20- fuera suspendido preventivamente hasta que presentó su renuncia que fue aceptada por parte del gobernador Axel Kicilof.
Entre las conductas violentas atribuidas a Dominoni se señaló que el ex magistrado amenazaba al personal con la pérdida de su lugar de trabajo, y una muestra de ello fue el sumario que impulsó en el 2019 contra un empleado a quien acusó infundadamente del cobro indebido de sumas de dinero en concepto de movilidad.
Cabe mencionar que el compañero violentado tuvo que abandonar la mesa de entradas del juzgado bajo la dirección de Dominoni donde trabajaba en ambulancia, por la descompensación que sufrió a consecuencia de la presión laboral que sufría y ello provocó el cambio de su lugar de trabajo en resguardo de su integridad psicofísica.
Esa denuncia motivó una instrucción pre-sumarial que finalizó recientemente con el sobreseimiento de la causa por la inexistencia del ilícito administrativo denunciado por el ex juez, dejando en claro que ello fue una represalia que buscaba desacreditar a una de sus víctimas de la violencia laboral.
La Suprema Corte tuvo la posibilidad procesal de haber desestimado el pedido de sumario a esta víctima (Art. 18 Ac. 3354 SCJBA) si hubiera contextualizado la denuncia de Dominoni en la desfavorable situación institucional que atravesaba ese juez y valoraba las adversas y apremiantes circunstancias que sufría el trabajador denunciado y la planta del Juzgado de Familia 4 local, pero optó por darle trámite por mas de tres años y con ello contribuyó a prolongar estado de sospecha sobre el mismo y la persistencia del daño psicológico que lo afectó.
Esta acción de Dominoni no es un hecho aislado dado que la repitió la titular de la Delegación de Arquitectura Mar del Plata Cecilia Di Bastiano cuando promovió un sumario contra el compañero Omar Muñoz Cuadrado cuando este estaba próximo a jubilarse el año pasado, que luego fue desestimado.
Indudablemente este archivo cierra un ciclo de violencia pero muestra que persisten patrones de disciplinamiento laboral que se reflejan en los procesos administrativos sancionatorios no obstante contar la Corte con las herramientas legales necesarias para desarticularlos en contextos de violencia como el descripto que trascienden a los cuerpos normativos y que reafirma aquello que se pregona desde la AJB, que sin lucha, no hay derechos!.