En el suceso anterior la empresa encargada del servicio de mantenimiento señaló que la falta de funcionamiento respondía a un falso contacto en la placa electrónica del tablero de comando general ubicado en la sala de máquinas. Ese desperfecto fue subsanado dos días después de producirse la falla que inutilizó el ascensor. Ahora se vuelve a repetir la situación y si bien no hubo ninguna situación de riesgo o accidentes que lamentar como ocurrirá en el pasado en otros edificios, lo cierto es que ante la sola posibilidad de que ello pudiera repetirse se debe controlar rigurosamente estas disfuncionalidades y tomar todas las medidas preventivas necesarias para garantizar la indemnidad de los y las trabajadoras judiciales del Fuero Penal Juvenil y del Fuero Civil y Comercial que allí prestan servicios, que constituye una obligación de la Suprema Corte de Justicia en ejercicio de la superintendencia originaria y/o delegada que le asiste y por su condición de empleadora.
¡Sin Lucha, No hay Derechos!